Reino Unido vivió su día más trágico desde que se desató la pandemia del coronavirus: se registraron en las islas 980 muertes en las últimas 24 horas.
De acuerdo con la información que brindó Matt Hancock, secretario de Salud del Reino Unido, es el mayor número diario de muertes por coronavirus hasta ahora y el país acumula un total de 8.958 fallecidos.
Hancock informó también que el jueves se realizaron 19.116 tests en todo el territorio británico, y que se identificaron 5.706 nuevos casos positivos, lo que eleva a 71.578 la cifra general de infectados.
El funcionario explicó que buscan testear a todo el personal de salud y que ya están funcionando 15 centros para que los trabajadores puedan ir en auto a someterse a una prueba para ver si tienen coronavirus o no.
Además, insistió en que están tratando de conseguir todo el equipamiento necesario para sus profesionales, debido a que muchos se quejaron que no tienen la protección suficiente.
Por otro lado, Hancock volvió a exhortar a los británicos a que respeten el confinamiento y permanezcan en casa pese al buen tiempo durante el fin de semana de Semana Santa, para limitar la propagación del virus.
En tanto, el primer ministro Boris Johnson, enfermo de COVID- 19, seguía este viernes recuperándose en un hospital, tras haber salido de terapia intensiva. «Fue trasladado a otro servicio del hospital St. Thomas y continúa su convalecencia, que sigue en fase inicial«, declaró su vocero.
Johnson, de 55 años, fue internado por primera vez el domingo pasado, 10 días después de dar positivo por coronavirus, una noticia que sacudió al país y que luego fue seguida por las confirmaciones de otras infecciones en su Gabinete y en su entorno íntimo, como su prometida Carrie Symonds, de 32 años y embarazada.
Según los medios británicos, después de haber sido dado de alta de la unidad de Cuidados Intensivos, Johnson llamó anoche a Symonds, quien también se está recuperando del virus y está a pocas semanas de ser madre.
Más temprano un vocero oficial del gobierno británico, informó que el líder conservador pudo hacer caminatas cortas, entre períodos de descanso, como parte de la atención que está recibiendo para ayudar a su recuperación.
«Habló con sus médicos y agradeció a todo el equipo clínico por la increíble atención que ha recibido», agregó.