Es una iniciativa impulsada desde el Polo Tecnológico de la Universidad Nacional de La
Matanza (UNLaM). Asimismo, la Casa de Altos Estudios puso a disposición sus
laboratorios y su sala de internación para colaborar en la lucha contra la pandemia.
La UNLaM brindó su apoyo y colaboración al Ministerio de Educación de la Nación y puso
a disposición vehículos, call center, laboratorios y su sala de internación con cinco camas –
donde los alumnos de Medicina suelen realizar sus clases prácticas-, para contribuir en la
lucha contra el coronavirus.
En tanto, el Departamento de Ingeniería e Investigaciones Tecnológicas y el Departamento
de Ciencias de la Salud, en conjunto con la empresa Circo Studio, instalada en el Polo
Tecnológico de la UNLaM, trabajan en el desarrollo de partes sencillas que contribuirán al
armado de máscaras de protección con el propósito de evitar la transmisión del virus
COVID-19.
Paralelamente, se está trabajando en el desarrollo de equipamiento y partes sencillas para
contribuir al sistema sanitario. Con ese fin, se rearmó el laboratorio en tres domicilios
particulares para trabajar en forma descentralizada. En total, harán uso de once impresoras
3D.
De esta manera, en diez días, se espera abastecer las necesidades de insumos médicos del
Hospital Italiano y del Hospital “Prof. Dr. Luis Güemes”, como así también de los
profesionales de la salud de la UNLaM.
La Universidad ha elaborado los siguientes objetos, que serán validados por las autoridades
competentes, para contribuir al sistema sanitario:
1. Máscara con acetato. Requiere tres horas de impresión y la primera producción fue
entregada al Hospital Interzonal General de Agudos “Prof. Dr. Luis Güemes”, de Haedo. El
Departamento de Ciencias de la Salud se encuentra analizando otros posibles diseños para
su posterior desarrollo.
2.Válvula Venturi. Son de uso descartable y, por ello, es necesario generar stock ya que son
esenciales para el funcionamiento de los respiradores artificiales.
3. Un objeto para manipular las manijas de puertas utilizando el codo, útil para evitar el
contagio y propagación del virus.
Todos los diseños elaborados son de código abierto y se encuentran disponibles a los
efectos de hacer frente a la demanda. Asimismo, se está trabajando en una plataforma para
guiar a otras entidades, como los colegios técnicos, que cuentan con más de veinte
impresoras 3D, para que puedan imprimir y sincronizar sus trabajos.
Por otra parte, la UNLaM está desarrollando un prototipo de equipo de respiración
mecánica para asistir a pacientes con coronavirus. Fue creado por el Laboratorio de
Electrónica de esta Universidad y apunta a configurar un diseño de bajo costo, de fácil
fabricación y con la mayor cantidad posible de componentes locales.
Una vez concluido el desarrollo y testeado su funcionamiento, se realizará la certificación
oficial por parte de los organismos competentes.La documentación del prototipo, sus planos
mecánicos y de circuitos electrónicos, el programa fuente y el procedimiento de armado,
quedarán disponibles para poder fabricarse en establecimientos con capacidades técnicas
apropiadas.
Este proyecto se elaboró en base a una publicación del Massachusetts Institute of
Technology y se adaptó a las posibilidades locales. Consiste en automatizar un AMBU
(Airway Mask Bag Unit), utilizado para la ventilación pulmonar manual, dándole al
profesional médico la posibilidad de regular tres parámetros: volumen (cantidad de aire que
se insufla al paciente, 5-10 ml/Kg), relación inspiración-espiración (en condiciones
normales, la inspiración -tiempo en el que se aporta aire al paciente- es un tercio del ciclo
respiratorio, mientras que los dos tercios restantes son para la espiración. Por lo tanto, la
relación I:E será 1:2) y frecuencia respiratoria (es la cantidad de ciclos –
Inspiración/Espiración- por minuto y pueden variar de 7cpm a 30cpm).
El equipo contará con un sensor de presión que activará una alarma (lumínica y sonora) en
caso de que la presión durante la espiración esté por debajo de los -20 cmH2O.
Participan en el desarrollo del proyecto el Ing. Néstor Mariño (INTI – UNLaM) y el Ing.
Ignacio Zaranik (UNLaM), junto a grupos de profesionales médicos del Hospital Churruca
y del Hospital Penna, de la Ciudad de Buenos Aires.
La UNLaM procura, a través de todas estas iniciativas y proyectos, optimizar y multiplicar
la producción de elementos sencillos que ayuden a descomprimir y aliviar el sistema de
salud en su lucha contra la pandemia.